Ya os he hablado en más de una ocasión de Gacela, el primer lanzamiento de Sugoi Ediciones, y por ende, la primera incursión de su autor, Surco Valbuena, en el mundo del cómic. Os he recomendado que lo compréis sabiendo de primera mano lo que decía porque antes de recomendarlo compré un ejemplar. Y la verdad es que esta reseña era algo que tenía que poner sí o sí para completar esa recomendación tan general.
Para empezar de fuera adentro, hay que decir que la edición que Sugoi ha hecho con Gacela es de las más cuidadas y personales que he visto en mucho tiempo. Una encuadernación en rústica muy bonita, con un tamaño manejable y una elección de colores acertada para una cubierta que llama a comprar. El interior lleva unas guardas con su página dedicada al número de ejemplar que se está comprando. El papel escogido es de un grosor lo suficientemente ancho como para agradecerlo al tacto, pero no tanto como para hacer la lectura díficil.
Ya metidos en faena, tanto la estructura de la historia como su desarrollo son tan sumamente personales, que es imposible ponerles un pero. Se juega en paralelo entre la historia que nosotros leemos (la de Rai) con la que el protagonista cuenta (la de Hamza), advirtiendo de las semejanzas y las adversidades que ambos niños tienen que padecer, cada uno a su manera. Lo que impera desde la primera a la última página es la mezcla de lo onírico con lo real, y la sucesión de momentos realmente trágicos, a nivel individual y a nivel más general. En este último caso, se puede advertir un grito en contra de los desmanes que el hombre comete tanto contra la naturaleza, como contra otros seres vivos, sean animales u otros hombres.
El apartado gráfico se ajusta como un guante a lo que la historia cuenta, y no podría imaginar un dibujo más detallado, o más cercano a los cánones técnicos compartiendo espacio con este tipo de historia. Eso no quiere decir que estemos ante un desastre, sino que se pondera lo que cada viñeta quiere transmitir por encima de la estética pura y dura.
En resumidas cuentas, el nivel al que llega Gacela para ser el debut como historietista de Surco Valbuena, y para ser el primer lanzamiento de Sugoi Ediciones, es tan alto que esa puede ser la mayor pega. Poniendo el listón tan alto será complicado que los sucesivos lanzamientos superen lo que Gacela ha dejado. No obstante, el reto para lo que venga es importante y eso puede hacer que esta pequeña pero valiente editorial se consolide como una sorpresa de lo más agradable.
No sólo estoy agradecido y contento por tus palabras, sino porque son sinceras. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy sincera Ulises. La verdad es que Gacela es una de las historias que más me ha gustado este 2011 que se acaba. Un abrazo.
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